“[Plegaria ante el peligro de la lengua engañosa] Cántico gradual A Jehová clamé estando en angustia y él me respondió.” Salmos 120:1 RVR1995
¿Has clamado alguna vez al Señor porque estabas verdaderamente angustiado o pasando una de las pruebas más difíciles de tu vida? Así como para el salmista fue una experiencia única, para mí también lo ha sido. Nunca había sentido una respuesta de Dios tan rápida y llena de amor. Fue un bálsamo a mi alma y un consuelo jamás experimentado. Quizás el Señor permite que pasemos por ese valle de angustia para que lo busquemos con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con toda nuestra mente.
Una vez, pasába yo por ese valle, sentí que perdía mi vida, mi vida eterna. Sin fuerzas, dándolo todo por perdido, hundido en lo más profundo del abismo... "Clamé" al Señor, con el último hilo de esperanza que tenía y allí, sin hacer nada que valiera algo, el Señor me tomó en sus brazos, con un cariño que nunca había sentido, con un amor tan grande que cubrió todo mi ser, todos mis pecados, todos mis defectos, todas mis heridas y... me respondió. Es una experiencia única, dolorosa, sí, pero extraordinariamente gratificante.
Puedo hacer mías las palabras del salmista, lo he experimentado en mi vida, Dios quiera que tu, puedas experimentarlo también, porque no serás el mism@, tu fe quedará fortalecida y eso no te lo podrán arrebatar.
"Clama al Señor con toda tu alma... y el te responderá"
